Comprender los vínculos entre la exclusión de los jóvenes, la salud y el crecimiento.
La exclusión financiera y social es una realidad para muchos jóvenes europeos en la actualidad. La falta de empleo impide que muchos contribuyan plenamente a sus comunidades, lo que daña tanto a las personas como a la sociedad en su conjunto. Examinamos las causas y los efectos relacionados con la salud de esta marginación y lo que se puede hacer y se está haciendo para mejorar la situación.
En 2015, el 14.8% de los jóvenes europeos menores de 25 años no trabajaban, ni estudiaban ni formaban (ninis). En 2016, la tasa de desempleo juvenil en Europa fue el doble que la de los adultos. En la actualidad, el número de jóvenes desempleados de larga duración y de menores de 25 años ha alcanzado los 4.2 millones.
Los desempleados sufren más ansiedad, depresión, síntomas psicosomáticos, menor autoestima y menor satisfacción con la vida. Visitan significativamente más a sus médicos, toman más medicamentos y pasan más días en cama enfermos en comparación con los que están empleados.
El estado de salud y los determinantes sociales de la salud están vinculados a la vulnerabilidad y empleabilidad de los jóvenes, lo que representa un círculo vicioso con impactos a largo plazo.
Hoy, con motivo de la convención anual para el crecimiento inclusivo 2017, EuroHealthNet ha lanzado un resumen de políticas sobre los vínculos entre la salud y la exclusión juvenil. Examina la situación actual en Europa y la legislación europea existente y propuesta en este ámbito. Describe varias prácticas nacionales diseñadas para abordar la exclusión de los jóvenes y ofrece algunas recomendaciones de política para el futuro.
Encuentre el resumen de la política sobre salud y exclusión juvenil aquí.